La vacuna nonavalente (Gardasil 9) del laboratorio Merck Sharp & Dohme), protege contra las infecciones causadas por el virus del papiloma humano por los serotipos* 6, 11, 16, 18, 31, 33, 45, 52, 58.

*Serotipos: Un serotipo del VPH es una variante específica del virus distinguida por sus proteínas de superficie. Hay más de 200 serotipos, algunos causan cáncer y otras verrugas. 

Durante el año 2024 recibirán la vacuna las niñas y niños que cursan 4° básico y 5° básico, con el siguiente esquema. 

Los niños y niñas que el año 2023 cursaban 4° básico y recibieron la vacuna tetravalente contra el VPH, durante el segundo semestre de 2024 mientras cursen 5° básico, recibirán la segunda dosis de vacuna tetravalente y con ello completarán el esquema.
En tanto, los niños y niñas que cursen 4° básico durante 2024, recibirán una dosis única de la vacuna nonavalente, no debiendo ser vacunados contra esta enfermedad en 5° básico.

El virus del papiloma humano (VPH) es un virus común que dependiendo de su condición puede clasificarse de bajo o alto riesgo.
Los VPH de bajo riesgo pueden causar verrugas genitales.
Los VPH de alto riesgo, causan en las mujeres más del 70 por ciento de los cánceres del cuello del útero, además de los cánceres de vulva, vagina y ano.
En los hombres puede producir cáncer de pene y ano.
Además el VPH puede causar cáncer en la parte de atrás de la garganta, incluidas la base de la lengua y las amígdalas (llamado cáncer orofaríngeo).
Existen más de 100 tipos de VPH, en su mayoría, inofensivos, pero aproximadamente 30 tipos se asocian con un mayor riesgo de cáncer.

El VPH es una infección viral que se puede transmitir de una persona a otra mediante las relaciones sexuales anales, vaginales u orales, o mediante otro tipo de contacto cercano con la piel durante actividades sexuales.

En Chile, el Cáncer del Cuello del Útero causa la muerte a más 500 mujeres jóvenes al año.
Las verrugas genitales representan más del 20 por ciento de las consultas por infecciones de transmisión sexual en los centros especializados, representando la infección de transmisión sexual más frecuente en los jóvenes de ambos sexos.

Los cánceres, entre ellos el del Cuello de Útero, son las enfermedades más graves entre las provocadas por el VPH. Si bien las verrugas genitales no son tan graves, sí causan gran molestia y requieren de tratamientos médicos especializados.

El Cáncer del Cuello del Útero no presenta síntomas hasta que ha avanzado a etapas muy severas. Por ello es fundamental la prevención, que las niñas se vacunen y que las mujeres mayores de 25 años se sometan a los exámenes de diagnóstico precoz (Papanicolaou u otros).

En el caso de las niñas, porque es necesario protegerla del Cáncer del Cuello del Útero y otras enfermedades causadas por el VPH. Todas las mujeres están expuestas a esta infección.
Las investigaciones demuestran que a edades tempranas el sistema inmune responde mejor a la vacuna que en edades mayores, por lo que la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda vacunar a esta edad.

En el caso de los niños, las investigaciones demuestran que a edades tempranas el sistema inmune responde mejor a la vacuna que en edades mayores.
En los hombres el VPH puede producir cáncer de ano, del pene. Además el VPH puede causar cáncer en la parte de atrás de la garganta, incluidas la base de la lengua y las amígdalas (llamado cáncer orofaríngeo)
Existen más de 100 tipos de VPH, en su mayoría, inofensivos, pero aproximadamente 30 tipos se asocian con un mayor riesgo de cáncer. En tanto que los VPH de bajo riesgo pueden causar verrugas genitales.

Sí, la vacuna puede administrarse a niñas y a jóvenes  mayores, pero idealmente antes del inicio de su vida sexual activa.
La vacuna está disponible para otras edades en los vacunatorios privados.

Estudios respecto a la duración de la protección de la vacuna contra virus papiloma humano indican hasta hoy 10 años, debido a que la vacunación a nivel mundial comenzó en el 2006, pero proyecciones estiman que puede prolongarse por 30 a 40 años. Está comprobado que la vacuna evita las lesiones iniciales del cuello del útero y por ello se espera que, a la larga, produzca una disminución franca de la mortalidad por esa causa.

La vacuna nonavalente (Gardasil 9), es producida por el laboratorio Merck Sharp & Dohme, al igual que la vacuna tetravalante, Gardasil. 

Como todos los medicamentos, las vacunas pueden provocar efectos adversos, siendo los más comunes el dolor y el enrojecimiento en el lugar de la inyección.

Si su hija o hijo al momento de la vacunación se encuentra resfriada o con fiebre (menor a 38 ºC) sí puede recibir la vacuna contra el VPH, ya que estos síntomas no constituyen contraindicación para vacunarse.

La vacuna contra el VPH no entrega protección total contra todos los tipos de Virus Papiloma Humano que pueden causar cáncer de cuello del útero. Por esta razón es muy importante que las mujeres mayores de 25 años continúen haciéndose las pruebas de Papanicolaou, incluso después de haber sido vacunadas. La mayoría de los casos de cáncer invasivo de cuello del útero se detecta en mujeres que no se han hecho la prueba de Papanicolaou con regularidad.

La vacuna se aplica en los establecimientos educacionales, hasta donde acuden profesionales de salud de los consultorios. Es importante señalar que la fecha se coordina entre el establecimiento educacional y el de salud. Una vez establecida la fecha, esta debe ser informada por el establecimiento educacional.

A través de la página del Departamento de Vacunas e Inmunizaciones: https://vacunas.minsal.cl; https://web.minsal.cl/vacunacion-contra-el-virus-del-papiloma-humano/ o comunicándose con Salud Responde al 600-360-7777.

Sí, el Decreto N° 1201 del 22 de noviembre del 2013 del Ministerio de Salud, dispone la vacunación obligatoria de la población que vive en Chile contra las enfermedades inmunoprevenibles, dentro de las que se encuentra el VPH. Esta vacuna produce lo que se conoce como «efecto rebaño» esto quiere decir que al aumentar la cantidad de personas inmunizadas a niveles cercanos a 100 por ciento, disminuye el número de susceptibles a la enfermedad y se reduce la probabilidad de infección, por lo tanto mientras exista mayor cobertura de vacunados, los que no lo están o tengan esquemas incompletos de vacuna, tienen menor probabilidad de infectarse.

La vacuna contra el VPH, así como todas las del Plan Nacional de Inmunizaciones, no tiene costo de ningún tipo para los grupos definidos, sin importar el sistema de previsión de salud (FONASA, ISAPRE, Fuerzas Armadas o de Orden y Seguridad) al que se esté afiliado. Ahora bien, para ello debe acudir a un vacunatorio público o privado en convenio.

Si no asiste ese día, debe acudir a un vacunatorio público o privado en convenio.

No. Independientemente de haber sido vacunadas contra el VPH, las mujeres deben usar las medidas recomendadas para evitar infecciones de transmisión sexual.

No. Lo que sí podría afectar la fertilidad es padecer un cáncer cérvico uterino, que es precisamente lo que previene esta vacuna.

Los colegios no deben solicitar autorización para vacunar a sus alumnas/os. Los padres deben saber el día de la vacunación. Si no desean que sea vacunada/o deben suscribir un documento de rechazo que les será entregado por el equipo a cargo de la vacunación. Con su firma declaran que han rechazado la vacuna, pese a conocer sus beneficios y los riesgos a los que exponen a su hijo/a.
También declaran que saben que pueden exponerse a acciones legales, ya que la vacunación es obligatoria.

El riesgo es para su hija, ya que no quedará protegida contra el cáncer de cuello de útero, que es una enfermedad que causa la muerte a alrededor de 500 mujeres jóvenes al año en nuestro país.
En el caso de los niños, no quedará protegido contra cáncer en edad adulta o verrugas u otras infecciones genitales.

La vacuna tetravalente cubre contra los serotipos 6, 11, 16 y 18. Estas 4 cepas son responsables de aproximadamente el 70% de los cánceres de cuello uterino y el 90% de las verrugas genitales.
En tanto que la vacuna nonavalente protege contra los serotipos 6, 11, 16, 18, 31, 33, 45, 52, 58, aumentando el nivel de protección.

La vacuna contra el VPH tiene por objetivo proteger a las niñas contra el Cáncer del Cuello del Útero, que anualmente causa en Chile más de 500 muertes a mujeres en edad reproductiva.
En tanto que en niños su objetivo es proteger contra enfermedades como cáncer de ano y pene ente otras.
Además, protege a ambos sexos contra enfermedades causadas por el VPH tales como las verrugas genitales.