El VPH y las enfermedades que previene la vacuna
El Virus Papiloma Humano (VPH) es un virus común, con más de 40 tipos, que infectan las mucosas de las personas, siendo la mayoría de las infecciones sin síntomas y pasajeras.
Algunos de los tipos cancerígenos de este virus pueden persistir y causar cáncer de cuello uterino y otros canceres menos frecuentes, como los de ano, pene, vulva, vagina y cavidad bucofaríngea. Otros tipos no cancerígenos pueden causar verrugas genitales y verrugas en las vías respiratorias de los niños (papilomatosis respiratoria).
El VPH se transmite a través del contacto genital (mucosas y piel), la transmisión no requiere de relación sexual directa, por lo que puede producirse también por la práctica de caricias o contacto de piel con las paredes del área genital. El VPH también se puede contraer durante el sexo oral. Debido a que la infección muchas veces no produce síntomas, la mayoría de las personas ni siquiera sabe que tiene VPH o que lo está transmitiendo.
La aparición del cáncer de cuello uterino es más frecuente entre los 35 a 55 años, debido a que el tiempo entre la infección por VPH y el desarrollo del cáncer es de 20 años en promedio, por lo que las personas con más riesgo de infectarse son los adolescentes y personas menores de 25 años. Debido a que la infección ocurre principalmente en la adolescencia, se recomienda la vacunación a la edad más temprana posible.
La vacuna contra el VPH que se utiliza en Chile se dirige específicamente a los subtipos 16 y 18, que causan no sólo aproximadamente 70% de los cánceres de cuello uterino, sino que también causan cáncer anal (95% relacionado con HPV), vulvar (50% vinculado), vaginal (65% vinculado), y orofaríngeo (60% relacionado). También se centra en HPV6 y HPV11, que representan aproximadamente el 90% de las verrugas genitales externas.